Un lugar acogedor y pintoresco. Ciclos Café (@cicloscafe) no es una cafetería como las demás, comprar café allí es toda una experiencia.
Fotos: Romina Deekes (@lacamaraderoma)
Un lugar acogedor y pintoresco. Al abrir la puerta para entrar te envuelve el olor a café recién tostado, si tienes la gran oportunidad de visitarlos en el momento adecuado. Ciclos Café no es una cafetería como las demás, comprar café allí es toda una experiencia. Una experiencia que está acompañada del aprendizaje que te brindan sobre el café que ellos venden. Desde dónde provienen y cuáles son sus procesos de fermentación, hasta características peculiares de cada uno de ellos y de los productores.
El nombre proviene de una idea curiosa y real, como replica Felipe Aliaga:
«El nombre proviene de que todos son ciclos en la vida, todo se acaba, todo empieza. El café está lleno de ciclos».
Su agua
Llegamos y en seguida nos alcanzaron vasos con agua, de la que, Flor Lindo, nos explicó un poco más. Ellos diseñaron su propia agua, puesto que es un componente muy importante al momento de tomar café. Su agua pasa por un filtro de agua de osmosis inversa, y es calibrada cada mañana con magnesio, calcio y fósforo. Ella misma agrega:
«Entonces el agua contiene entre 60 a 70 partículas por millón. Es un agua más delicada, ligeramente dulce. Usamos esa agua para todas nuestras bebidas, incluso las plantas son regadas con esa agua».
Sus cafés
Flor continuó brindándonos más información sobre los cafés y sus productores. Tienen cafés del norte de Perú, de Jaén, de la Coipa y de San José de Alto Jaén en Cajamarca. También del centro, de Palomar Chanchamayo. Ellos solo trabajan con procesos de fermentación lavado y procesos naturales. Como explica Flor, «el proceso natural incluye todo y pulpa, y suelen ser más dulces». A diferencia del proceso honey, en el que le dejan un porcentaje de la pulpa en el proceso de fermentación. Por otro lado, el proceso skin contact, es distinto porque en la fermentación le agregan la cáscara de otra variedad del mismo café. Otro tipo es Café – 4, porque es fermentado a – 4 Cº. También trabajan con productores de Cusco: Sara Gamarra, de Sillapata, y Bequer Hidalgo.
Ellos tuestan el café, es por eso que el sabor amargo no es protagonista del resultado final. Cuentan con 3 tostadoras, una de 6 kilogramos, de 1 kg. y de 50gr., que sirve para tostar café de muestra.
En Ciclos Café puedes comprar café también para preparar en casa. Son vendidos en grano. En el packaging incluyen información del productor, el proceso de fermentación utilizado y los sabores que se pueden encontrar en ese café, bajo Felipe, quien es catador de café certificado. También encontrarás recomendaciones para preparación del café a detalle, y qué hacer en caso se desee ácido o dulce, o un café de más cuerpo en taza o inclusive amargo.
Historia de Ciclos Café
Ciclos nace a partir de Cacaotal, un negocio de Amanda Jo Wildey, quien en medio de sus catas y experiencias de chocolate, recibía sugerencias de incluir también cafés. Entonces, decidida, entró en el mundo del café, y ella nos cuenta que:
«Después de muchos encuentros y de conocer a varios personajes en el mundo de café, por un colega en común, conocí a Felipe, y desde el inicio hablábamos un idioma parecido con una mirada compartida».
Felipe Aliaga es catador de café certificado en Portland, por la Coffee Quality Institute. Eso quiere decir que, tiene una base académica para evaluar el café, no es solo un aficionado que se deja llevar por sus gustos y preferencias. Tal como explica Amanda: «Felipe sabe cómo quiere su café gracias a un trabajo de campo de muchos años. Ha vivido en fincas de café desde el 2015, en Cusco, en la Selva Central».
Todas estas experiencias fueron un pilar sólido para idear y llevar a cabo Ciclos Café. Que tiene como propósito generar y establecer buenas relaciones y amistades con todos sus productores, a pesar de las diferencias entre sus productos.
De la misma manera, Felipe recalca, que una parte importante de Ciclos, es el equipo de profesionales con los que trabajan.
Es así como, lo que percibí desde el inicio fue confirmado con una declaración de Felipe:
«No queremos ser un cafecito, nos vinculamos a lo que es un fine dining, prestamos atención a los detalles, el suelo, la música, entras al baño y ves que está relacionado con el café; el agua, que es lo más importante en una taza de café. Tal vez más importante que el café».
