Desde que tenía diez años, Bruno Pinasco estuvo metido en un estudio de filmación. Probablemente, todos lo conocemos por conducir el programa Cinescape, pero no por su faceta de escritor. Ahora se ha adentrado en el mundo literario con Tea Shop, su primera novela que ya deja ver una secuela. Esta historia es una mezcla de ese encanto nostálgico por el cine, la música y el estilo clásico que convergen con la era moderna en una relación romántica. Conversamos con él sobre Tea Shop 2.

¿Cómo nace tu pasión por el té?

Nunca le agarré gusto al café ni me enganché con su mística ni su filosofía. En la era de Cinescape, viajaba para conocer otros países y sus culturas. Londres y Tokio eran dos de los destinos a los que más me tocaba viajar por lo menos una vez al año, donde el té es la bebida nacional. Allí descubrí la fascinación que hay detrás de la bebida y la logística para ponerla en la mesa, junto con la variedad de sabores y aromas.

¿De esa afición proviene el libro?

La idea original era hacer un proyecto audiovisual. Estaba presentando muchas ideas para crear proyectos para realizar series o películas. Entre ellas surgió la historia de una tienda de té con el personaje de Grey, un chico que tenía la habilidad de preparar diversas variedades de esta bebida y cambiarle el humor a la gente de acuerdo con lo que iba a servir. Era como un alquimista. Cuando presenté la propuesta les agradó, y me dijeron que podía convertirse en un libro muy bonito. Es así como la Editorial Planeta tuvo la apertura de escucharme.

¿Siempre tuviste la idea de hacerlo ilustrado?

Al principio iba a ser estilo cómic, como una novela gráfica. Mi editor me dijo que muchas de las cosas que estaba escribiendo no iban a poder salir porque debíamos resumir lo más posible. Como ya teníamos a una ilustradora embarcada en el proyecto, decidimos hacer una novela con ilustraciones. Llegó el punto en que se necesitaron más manos. Por eso la primera parte tuvo tres ilustradores. Yo tenía la historia superclara al igual que los personajes. Muchas cosas en las relaciones transcurren vía WhatsApp. Es algo que quería incluir como parte de la dinámica.

¿Qué diferencias encuentras entre Tea Shop 2 y la primera entrega?

La historia va madurando junto con los personajes. Hay más dinámica entre ellos. Al inicio, Grey y Eliot se conocen. Se aprecia la ilusión por lo desconocido sumado al drama del Boulevard y la tienda de té. En Tea Shop 2, la premisa del libro es la toma de decisiones y cómo afrontar los cambios en la vida. Ello sin dejar el humor, el encanto y que los personajes siguen siendo entrañables. Las situaciones son lo más cotidianas y naturales posibles. Obviamente, siempre con el toque de ficción que le da un toque idílico.

¿Hay mucho de ti en la historia?

Mis amigos cercanos me han dicho que sienten que estoy en cada página, pues había volcado todas mis aficiones, gustos, intereses y anécdotas; sobre todo en el primer libro. Este es un libro entretenido que busca inspirar a la gente hacia lo positivo. Espero pronto sacar la tercera parte.